LOS PLANETAS PERSONALES: EL SOL, LA LUNA Y MERCURIO (PARTE 1)

¡Hola a todos! ¿Qué tal? Como nuestra Escuela de Astrología está a punto de comenzar de nuevo, pensé en hacer un pequeño resumen sobre los planetas, signos y casas en el tema natal. En este post hacemos un pequeño resumen sobre los tres primeros planetas (Sol, Luna y Mercurio). En una serie de publicaciones posteriores también profundizaremos en los otros planetas «personales» (Venus y Marte), los planetas «sociales» Júpiter y Saturno, y los planetas «remotos» que están en las afueras del sistema solar.

EL SOL

Es el centro radiante de todo el sistema solar, el único cuerpo celeste que brilla con luz propia, reflejándola en todo lo que le rodea. De consecuencia, en el sistema astrológico representa el «Sí mismo», el centro de la identidad consciente. Su objetivo, por supuesto, es brillar, irradiar sus propias cualidades a su entorno y traducirlas en actividades e iniciativas a su imagen y semejanza. El signo en el que se encuentra en el momento del nacimiento está tan arraigado en nuestro sentido de identidad personal que dice “Soy Aries, soy Tauro”. Podemos decir, con una imagen poética que no se aleja mucho de la verdad, que el Sol representa ese “fragmento de lo divino” que habita en cada uno de nosotros.

En tema de cada uno es absolutamente «diferente» (según el signo y la casa en la que se encuentra, según los aspectos que forma con el resto de tema) y al mismo tiempo participa de la misma divinidad del Sol que nos arropa a todos. Por eso, el Sol representa lo que nos hace únicos, pero a la vez ese anhelo común de eternidad. Para realizar la mejor versión de nosotros mismos y reconectarnos con nuestro lado divino. Expresa nuestro «propósito», nuestra vitalidad, el impulso de afirmación y representa, por así decirlo, el ápice de los «valores masculinos», evidentemente presentes tanto en hombres como en mujeres. Está asociado (junto con Saturno) con la figura paterna y rige el signo de Leo.

LA LUNA

Si el Sol es el vértice del pilar masculino, la Luna es el vértice del femenino, también en este caso tanto en hombres como en mujeres. Es la luminaria nocturna, más íntima y recogida que el Sol, y representa todo nuestro mundo interior. La emotividad, los sentimientos, la sensibilidad, pero incluso antes, se asocia con el inconsciente, los estados de ánimo y todo lo que la psicología define como inteligencia emocional. Representa nuestras necesidades y la forma en que podemos satisfacerlas, cuidándonos. Empezando por la nutrición, la primera necesidad de cada uno de nosotros. Y suele llevar la impronta de la primera figura lactante y protectora: la madre.

Por eso, la Luna representa el ambiente materno y más generalmente familiar que nos forma. De forma figurada representa la historia, el pasado, los legados que por un lado nos sostienen (como raíces) pero por otro también nos mantienen algo anclados. Representa la memoria, en el sentido nostálgico del apego a lo que ha sido, mientras que como veremos los procesos mentales de memorización pertenecen al ministerio de Mercurio. Representa nuestras respuestas inmediatas a los estímulos del entorno que nos rodea, los reflejos directos de la mente consciente y, por lo tanto, también nuestros hábitos y patrones de comportamiento. Se asocia, como decía, a la figura materna y rige el signo de Cáncer.

MERCURIO

Mercurio es el planeta del pensamiento, el habla, la comunicación y, en general, de todos los procesos lógicos. No pertenece al pilar masculino (como el Sol y Marte) ni al pilar femenino (como la Luna y Venus). Más bien, se desplaza entre los dos. Los pone, de hecho, en comunicación. Tanto es así que la figura mitológica de referencia (Mercurio en latinidad, Hermes Trismegistus para el mundo griego) era el mensajero de los dioses y tenía el poder de moverse libremente entre el Olimpo, la tierra de los mortales y el Hades, el mundo de las almas difuntas. Y también en el léxico astrológico, Mercurio incluye estos tres símbolos: movimiento, comunicación e intercambio.

Desde el movimiento e intercambio entre neuronas (que produce el pensamiento), al intercambio de ideas y puntos de vista (en la base del diálogo) hasta el intercambio entre bienes y mercancías: el comercio. Tanto es así que todos los medios de transporte, redes viales y medios de comunicación (desde la carta anticuada hasta el celular) pertenecen al ministerio de Mercurio precisamente por su función de “interconexión”. Ideas, pensamientos, palabras, lenguaje pertenecen a Mercurio. Se asocia a la educación inferior (escolarización), a los hermanos y hermanas y rige los signos de Géminis y Virgo.

En el próximo post hablaremos de los otros dos planetas “personales”: Venus y Marte. Y luego, gradualmente, viajaremos por el resto del sistema solar. Luego también haremos una recapitulación sobre signo y casas. En resumen, el camino es largo, pero al final, como la olla de oro en el arcoíris, seremos capaces de leer e interpretar nuestra carta natal. Pero, sobre todo, es un verdadero «viaje», capaz de regalar emociones e inspiraciones preciosas a lo largo del camino… y estamos sólo al principio.

¡Abrazos para todos!

Con amor,

xxx

S*

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